Si tengo un golpe lateral, ¿mi hijo sentado ACM va seguro?

Si tengo un golpe lateral, ¿mi hijo sentado ACM va seguro?

Si tengo un golpe lateral, ¿mi hijo sentado ACM va seguro?

Un impacto lateral es uno de los escenarios más peligrosos que nos podemos encontrar.

El impacto lateral es uno de los escenarios más peligrosos que nos podemos encontrar, en cuanto a las lesiones derivadas del mismo. El escaso espacio entre el pasajero y el lugar de impacto ha requerido a los fabricantes de automóviles un esfuerzo continuo en la investigación y mejora de los sistemas de seguridad pasiva enfocados a mejorar la seguridad de los ocupantes en este tipo de impactos.

La simulación de laboratorio, que no refleja un impacto real, ha llevado en ocasiones a dudar de la eficacia de una silla ACM en impacto lateral, cosa llamativa puesto que no se duda de la eficacia de una silla de frente, tal vez porque estemos más acostumbrados a ver sillas de frente que a contramarcha. La realidad es que la probabilidad de recibir un impacto lateral puro, es baja, pero si se produce, no habría diferencia entre viajar a favor o en contra de la marcha.  Sin embargo, la probabilidad de que, estando en circulación, haya un golpe que se recibe lateralmente en cualquiera de las posibles direcciones, es más alta.

En ese escenario, es decir, con un coche en circulación que tras un primer frenazo es golpeado lateralmente, ¿es igual de eficaz una silla de frente o de espaldas?
Pensemos en ese primer momento del frenazo.  Sentado de frente, la cabeza del niño se desplazará hacia delante, saliéndose de la protección de la silla. Sentado de espaldas, la deceleración hará que la cabeza y tronco del niño queden completamente dentro de la zona de protección de la silla.
Si en ese momento el coche recibe un impacto a nivel lateral, lógicamente quedará más protegido el niño que va dentro de su silla, que no el que se ha visto empujado hacia delante por el frenazo previo.

Quedará más protegido el niño dentro de su silla que si se ha visto empujado hacia delante por el frenazo previo.

¿Cuál es la plaza más segura del coche para llevar a mi hijo?

¿Cuál es la plaza más segura del coche para llevar a mi hijo?

¿Cuál es la plaza más segura del coche para llevar a mi hijo?

La seguridad máxima la proporciona un sistema de espaldas a la marcha. Por lo tanto, la plaza más segura del coche será aquella que permita instalar una silla ACM.

Por ejemplo: estadísticamente la plaza menos segura es la del copiloto. Es la más expuesta ante un impacto frontal. Sin embargo hay que saber que la estadística se basa en datos de ocupantes sentados de frente. En una silla ACM el ocupante está protegido por la silla, en lugar de expuesto a las fuerzas de deceleración.

Por lo tanto, si hay que elegir entre llevar a un niño sentado de frente en la banqueta trasera (estadísticamente más segura) o de espaldas en el asiento del copiloto (estadísticamente menos seguro), la elección deberá basarse en primer lugar en la protección que ofrece el sistema a su ocupante. En ese caso, en el que no es posible instalar la silla ACM detrás, la opción segura será llevar al niño en el asiento del copiloto.

Otra cuestión que preocupa con frecuencia es si es preferible instalar la sillita de bebé en la plaza central por ser esta plaza la que sale mejor parada en las estadísticas de siniestralidad. La duda suele surgir cuando observamos que, como sucede en la mayoría de turismos, esa plaza no es una plaza completa, o no dispone de anclaje isofix (y las laterales sí). ¿Qué es mejor?

De nuevo hay que considerar que los datos estadísticos se han recogido sobre pasajeros sentados de frente y sobre vehículos en los que las plazas centrales raramente van ocupadas. Teniendo ambas cosas en cuenta, se observa que la lesión más probable en un pasajero sentado de frente, se deriva del golpe de la cabeza contra un objeto rígido, esto es, contra el asiento de delante. Puesto que la plaza central trasera, o está vacía o no tiene asiento delante, es fácil deducir que en esa plaza el riego de traumatismo reflejado en las estadísticas es claramente menor. Sin embargo, cuando hablamos de un niño sentado en una silla ACM, el riesgo de golpear la cabeza contra el asiento de delante es nulo. Por lo tanto para ese niño, estadísticamente hablando, el ir en la plaza central no va a suponer diferencia respecto a una de las laterales y no tiene sentido instalar la silla en la plaza central si eso supone realizar una instalación de peor calidad.

No tiene sentido instalar la silla en la plaza central si eso supone realizar una instalación de peor calidad

Estoy esperando un bebé, ¿qué es más seguro, usar un grupo 0+, o 0/1?

Estoy esperando un bebé, ¿qué es más seguro, usar un grupo 0+, o 0/1?

¿qué es más seguro, usar un grupo 0+, o 0/1?

Para que el bebé vaya seguro ha de ir sentado de espaldas. Eso es inapelable. Cualquier opción que recorte el tiempo ACM por debajo de los 4 años será una opción insegura.

¿Y qué hace más conveniente una silla de espaldas u otra?

Dos circunstancias: el niño, y el coche. Si la silla de espaldas se adapta bien al niño y al coche, hablamos de una silla eficaz. Si no, pues no lo será tanto.

¿Grupo 0+, grupo 0/1…? La que se adapte. Hay grupos 0+ que quedan muy verticales, así que por muy pequeñita que sea la silla, el bebé no va bien colocado. Y hay grupos 0/1 que no se adaptan lo suficiente, bien por el reclinado, bien porque no ajustan bastante el tamaño del habitáculo

Es decir, hay modelos más adaptables que otros. La cuestión es buscar qué modelo soluciona mejor nuestras circunstancias particulares. Porque mientras se adapte bien al bebé y al coche, solucionado.

Para que el bebé vaya seguro ha de ir sentado de espaldas. Eso es inapelable.

Entonces, a la hora de valorar la adaptación general de un modelo a las circunstancias personales, conviene mirar ciertos aspectos:

  1. Uno, primordial cuando se trata del uso con un recién nacido, es el reclinado. En coches con anclaje isofix, los grupos 0+ ven limitada su reclinación por la altura del anclaje e inclinación de la banqueta. El reclinado de un grupo 0+ no puede exceder de un cierto ángulo pues sería peligroso para el bebé (precisamente por el tamaño pequeño de la sillita). Así pues tienen menor versatilidad en ese sentido, y normalmente suplen eso a base de reductores que con forma de cuña, tumban un poquito más al bebé. Eso es lo que encontramos en la mayoría de grupos 0+ del mercado.
  2. Luego está, como segundo aspecto a valorar, qué hace la silla para reducir el espacio en torno al bebé. Y aquí tampoco hay reglas, hay grupos 0+ que lo hacen muy bien, y otros que no. Y grupos 0/1 que lo hacen muy bien, y otros que no. En caso de que ambas soluciones (grupo 0+ y grupo 0/1) se ajusten bien, ¿es más seguro un grupo 0+? No necesariamente, al menos no tenemos datos al respecto.

Y aquí llega el otro tema, el de poner el grupo 0+ sobre el cochecito de paseo. Y sí, a todos en algún momento nos ha parecido que eso es un detalle importante. Pero práctico para nosotros en todo caso, no para el bebé. O no tanto. Si pensamos en la silla de coche como el equivalente a un casco de moto, ¿nos dejaríamos el casco puesto para echar una siesta..? ¿O para entrar al hiper a hacer la compra que total es solo un momento? ¿O para pasear un rato y no llevar así la gorra para el sol..? Parece absurdo ¿verdad? No lo hacemos por una cosa sencilla: no es cómodo. Es para ir en la moto, es un elemento de seguridad, pero la protección nos obliga a llevar una cosa que aprieta, que pesa, y que da calor. Bueno, pues es exactamente lo que le pasa al bebé en la silla del coche. La protección le obliga a adoptar una postura semi incorporada que no es cómoda, que es forzada en cierto modo, y lo es porque en el coche es la manera de protegerlo. Además va rodeado de materiales ignífugos, que no transpiran, y que no son termorreguladores. Vamos, que dan calor en verano y frío en invierno. Y todo eso, que es necesario para protegerlo en el coche, nos suscita la siguiente pregunta: ¿tiene sentido mantenerlo cuando ya no existe el riesgo?

– Vaya, pero es por no moverlo de la silla cuando se ha dormido.

Y de nuevo hay que plantearse: ¿Me quedaría yo echando la siesta en una silla de camping teniendo una cama cerca? ¿Por no moverme? … Pues es aplicar el mismo criterio al bebé.

Sí que hay circunstancias que hacen interesante el que el grupo 0+ se acople al carro de paseo. Por ejemplo, para padres que viajan a menudo en transporte público. Padres que con frecuencia tienen que tomar un tren, o un avión, en ese caso es interesante llevar la silla de coche de manera cómoda, para que a la llegada puedan tomar un taxi o coche sin más problemas.

Por tanto, ¿es mejor o peor entonces optar por un grupo 0+ frente al 0/1? Pues depende de las circunstancias de cada cual, lo que pesen otros factores como la movilidad (por ejemplo) durante el período de grupo 0+. Y al revés, lo mismo, dependerá de las circunstancias personales, y en ningún caso de la seguridad mientras se observen las reglas antes expuestas:

  • De espaldas hasta al menos los 4 años
  • Correcta adaptación al coche
  • Correcta adaptación al niño
¿Puedo instalar la sillita de auto en el asiento del copiloto?

¿Puedo instalar la sillita de auto en el asiento del copiloto?

¿Puedo instalar la sillita de auto en el asiento del copiloto?

Sí, siempre y cuando se cumpla alguna de las excepciones que impone la ley:

a.- Cuando el vehículo no disponga de asientos traseros

b.- Cuando todos los asientos traseros estén ya ocupados por menores

c.- Cuando no sea posible la instalación de un sistema homologado en dichos asientos. sentados que hagan uso de estos sistemas.

d.- Cuando por cuestiones médicas o de diversidad funcional, y siempre acompañado del correspondiente certificado médico, se haga necesario el transporte en el asiento del copiloto.

Por tanto, en casos como el de tres sillas que no caben en la banqueta trasera, será posible instalar una de las sillas delante. También en el caso en el que la silla ACM no se pueda instalar detrás por falta de espacio, o por imposibilidad material (largo del cinturón de seguridad insuficiente, o plaza con cinturón de dos puntos).

 

Se pueden instalar siempre y cuando se cumpla alguna de las excepciones que impone la ley

¿Cómo puedo saber el tiempo de uso ACM que me permite mi silla?

¿Cómo puedo saber el tiempo de uso ACM que me permite mi silla?

¿Cómo puedo saber el tiempo de uso ACM que me permite mi silla?

Las sillas ACM tienen DOS límites de uso:

1. POR PESO:

Viene especificado en la etiqueta de homologación, tanto en dispositivos R44/04 como en UN R129 (comúnmente conocida como I-size). Por lo general los límites son los correspondientes a los grupos:

– Grupo 1 tiene un peso máximo de 18kg
– Grupo 2 tiene un peso máximo de 25kg

Cuando se trata de sillas de la Normativa UN-129, este indicativo es por talla, es decir, hasta 105 cm o hasta 125 cm, por ejemplo.

No obstante hay dispositivos isofix en los que el peso máximo puede estar entre estas dos cifras, por lo tanto conviene cerciorarse siempre en el etiquetado e instrucciones.

2. POR TALLA:

– Sillas con homologación R44/04: la altura máxima depende del respaldo de la silla. La recomendación general en un dispositivo ACM es que la cabeza no rebase la altura total del respaldo (cabezal incluido).
– Sillas con homologación UN-129: la altura límite la facilita el fabricante en el etiquetado. Puede ir desde los 87cm (unos 2 años
aproximadamente), hasta los 105cm como máximo.

Ambos criterios son limitantes por sí mismos. Es decir, en el momento en que se alcance uno de los dos límites, bien sea el peso, o bien sea la altura, la silla habrá alcanzado el fin de su uso.

Una silla jamás debería utilizarse una vez superado alguno de los límites (sea peso o talla) que marca su fabricante. Es de vital
importancia, por tanto, conocer esta información para utilizar el dispositivo correctamente, y mantenerlo dentro de su margen de eficacia máxima.

En el momento en que se alcance uno de los dos límites, bien sea el peso, o bien sea la altura, la silla habrá alcanzado el fin de su uso.

¿Es aconsejable comprar una silla de segunda mano?

¿Es aconsejable comprar una silla de segunda mano?

¿Es aconsejable comprar una silla de segunda mano?

sillas de auto de segunda mano

Una silla usada es a menudo una opción que aparenta ser interesante, por el menor coste que representa. Lo habitual es que se presente bajo la colilla de “en perfectas condiciones”. Pero esa frase hay que ponerla en cuarentena por varios motivos:

  • La silla sufre un desgaste por el mero hecho de ser utilizada. Pero el desgaste es diferente según el tipo de manipulación a la que se haya sometido.
  • La silla puede haberse visto implicada en algún escenario que merme su capacidad de respuesta futura. Puede ser un accidente, o un “incidente”, es decir un frenazo fuerte que haya debilitado los materiales (véase aquí la conveniencia de cambiar el dispositivo tras un accidente) pero que no deje huella visible. Es posible que los propietarios de la silla no sepan sobre la conveniencia de desechar el uso de ese dispositivo y, viendo que está en aparente buen estado, piensen que es razonable seguir su uso, y ponerla a la venta.
  • La silla tiene una caducidad determinada, de la que habrá obviamente que descontar los años previos de uso.
  • Por supuesto se verá afectada por las mismas circunstancias que cualquier otro producto de segunda mano tales como perdida de garantía, atención posventa limitada, e instalación no supervisada por un profesional, ausencia del propio manual de instrucciones, etc.

Necesitamos la silla para el momento en que nos vemos envueltos en un accidente. Si no es así, no habrá problema. Pero desgraciadamente no sabemos si nos tocará, o no, o cuándo lo hará. Lo que sí sabemos es que en ese momento no tendremos segundas oportunidades. Si por haber adquirido una silla de la que no sabemos su historia previa, o que no ha sido debidamente instalada, el resultado no es el esperado porque el sistema no funciona correctamente, ya no tendremos vuelta atrás.